
Bodegas El Regajal
BODEGAS EL REGAJAL
El Regajal es una singular finca situada en el término de Aranjuez, en el límite sur de la Comunidad de Madrid, conocida por todos los entomólogos del mundo. No en vano en sus tierras pueden encontrarse hasta 77 de las 225 especies de mariposas censadas en la Península, interesantes no solo por su número, sino también por la rareza de algunas de ellas.
Desde mediados del siglo XIX es conocida por su riqueza en mariposas, y organizaciones prestigiosas como la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y sus Recursos ha mostrado su interés por ella, y se ha llegado a escribir que "El Regajal es único, no solo en España sino en todo el mundo".
La familia García-Pita, actual propietaria de la finca, ha querido combinar las actividades de investigación entomológica desarrolladas en El Regajal con un proyecto vitivinícola de alta calidad, que se compone de un viñedo de 15 hectáreas y una bodega de vinificación y crianza.
Viñedos
En el año 98 se comenzó la plantación de la viña. Está compuesto por Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot, Petit Verdot y Syrah, cultivados bajo las premisas de la biodinámica. La finca se estructura en una vaguada principal, rodeada de colinas y cerros, con vaguadas laterales, recorrida por un riachuelo de escorrentía y alimentado por filtraciones del Mar de Ontigola. Su vegetación está dominada por coscojas, como exponente del encinar manchego en degradación, alternado con esparto, retama, tomillo, olivar, y viña.
Cuenta con un clima continental propio de la meseta, con inviernos fríos y veranos secos y calurosos, atemperados por los ríos Tajo y Jarama que confieren un microclima especial.
Los suelos se dividen en tres estratos, calizo en superficie, arenoso y yesífero al centro y arcilloso en el fondo.
Elaboración
La finca cuenta con una pequeña pero moderna bodega. Cada variedad se vinifica por separado en pequeños depósitos de acero inoxidable hasta el ensamblaje final. El vino envejece en roble francés hasta su embotellado sin filtrar ni pasar por frío.