
Comprar vino Dehesa de los Canónigos Crianza
La fama de los crianzas de Ribera del Duero debe mucho a la calidad de este tinto de Dehesa de los Canónigos que, entre otros lujos, cuenta con el de elaborarse con cepas de unos cuarenta años de edad. Su mejor virtud: el buen entendimiento de la fruta y la barrica, lo que garantiza un alto nivel.
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- Tipo
- Tinto
- D.O
- Ribera del Duero
- Vinificación
- Despalillado suave y fermentación en barricas de roble. Fermentación maloláctica en barricas de roble nuevas. Crianza en barricas y sobre sus lías durante 22 meses sin trasiegos. Reposo en botella durante 10 meses antes de salir al mercado.
- Variedad de uva
- Tempranillo y Cabernet Sauvignon
- Productor
- Bodegas Dehesa de los Canónigos
- Origen
- Pesquera del Duero (Valladolid)
- Graduación Alcohólica
- 14
- Viñedo
- Distintos viñedos dentro de la finca que responden al nombre de La Sagra Nueva, Cotarro, Palomar y Cabernet. Viñedos en espaldera cultivados según las tradiciones locales. Densidad de plantación: 2.200 plantas por hectárea. Superficie de 42 hectáreas. Edad de 40 años. Suelo arcillo-arenoso. Clima Mediterráneo con influencias continentales. Rendimiento de 4000 kilogramos por hectárea.
- Envejecimiento
- 15 meses
- Vista
- Rojo picota, de capa media. Reflejos brillantes.
- Nariz
- Recorre un abanico que incluye la fruta negra madura, el regaliz y otros que remiten al tueste. Buena armonía aromática.
- Boca
- Entra con brío, dejando al paso una grata sensación frutal. Se muestra directo, fresco, carnoso. Brinda ricos aromas por vía retronasal: frutas, especias...
- Maridaje
- Ideal para todo tipo de carnes incluida la caza, además de quesos curados y embutidos.
- Tim Atkim
- 90
- 5%
- 10
BODEGAS DEHESA DE LOS CANÓNIGOS
Dehesa de los Canónigos, en la Ribera del Duero, forma parte de ese conjunto de espacios protagonistas de la Historia. La finca, ubicada en el término municipal de Pesquera del Duero, debe su nombre a sus primeros propietarios, los veintidós canónigos que componían el cabildo de la catedral de Valladolid.
Tras vivir múltiples circunstancias históricas, fue en 1931 cuando los antepasados de la familia Sanz Cid compraron la finca. Una de las razones de esta adquisición tiene que ver con los vínculos vinícolas de la propiedad, pues en ella vivía nada más y nada menos que la familia Lecanda, fundadora de la mítica Vega-Sicilia. Los Lecanda, vascos afincados en la Ribera, se construyeron poco menos que un caserío en tierras del Duero, estilo que el principal edificio de la finca no ha perdido.
Actualmente Iván y Belén Sanz Cid conducen las riendas de la bodega, que inició su andadura como tal en 1989 (antes se había limitado a vender las uvas a otras bodegas), manteniendo firme la decisión de su padre de hacer vinos a partir de la mejor materia prima.
Enoturismo
Entre otras apuestas, Dehesa de los Canónigos ha desarrollado un importante plan enoturístico, confiando en que la mejor manera de vender su vino es contagiarles in situ la pasión con la que se vive en la finca. Para ello han restaurado las viejas naves de más de ciento cincuenta años de la propiedad. El entorno, un frondoso bosque de pino mediterráneo que se extiende hasta orillas del Duero, no puede ser más apropiado para disfrutar del vino sin prisas y en las mejores instalaciones posibles.
