
La Finca Espolla está situada en las estribaciones de los Pirineos, en la zona conocida como Les Alberes, y se caracteriza por su suelo pizarroso y ácido, de un característico color negro. Su vino homónimo destaca por su nariz intrigante de frutas roja y por una boca afrutada y fresca.






- D.O
- Empordá
- Variedad de uva
- 65% Syrah y 35% Monastrell
- Vinificación
- Uva seleccionada y recolectada a mano. Vinificación en tinos. Maceración larga. Fermentación controlada a 25 ºC. Crianza de 24 meses en barrica bordelesa nueva de roble francés Allier. El resto del envejecimiento lo experimenta en botella.
- Viñedo
- Finca Espolla. La finca está situada en las estribaciones de los Pirineos, en la zona conocida como Les Alberes. En ella se cultiva a una densidad alta, de 6.200 cepas por hectárea. Superficie de 21 hectáreas. Suelo pizarroso y ácido, de un característico color negro.
- Envejecimiento
- 24 meses
- Productor
- Perelada Comercial S.A (C/Pere II de Montcada 1, 08034 Barcelona, España)
- Origen
- Villafranca del Penedés (Barcelona, España)
- Graduación Alcohólica
- 15%
- Peso
- 750 ml
- Vista
- Color rojo cereza intenso con menisco violáceo.
- Nariz
- El aroma recuerda los frutos rojos y las notas balsámicas.
- Boca
- Intenso, elegante, equilibrado, redondo y expresivo. Es un vino que expresa marcadamente su personalidad varietal y la del terruño de donde proviene.
- Tipo
- Tinto
Perelada & Chivite es hoy un referente en el mundo vitivinícola. Con presencia en las principales denominaciones de origen, más de 450 ha. de viñedos en propiedad y más de 320 ha. de explotación controlada, la vinculación de nuestra firma con el mundo del vino se remonta a 1647, fecha en la que aparece documentada la primera transacción de una de nuestras bodegas, Chivite.
La familia Suqué Mateu, propietaria de Perelada & Chivite, busca mantener la identidad de las diversas zonas productoras, potenciando el respeto al terroir y a los paisajes donde se desarrolla la actividad vinícola de cada una de las marcas que conforman una completa colección de vinos únicos.
La relación directa de la familia con el mundo del vino se remonta a la figura de Miguel Mateu, quien compró en 1923 el Castillo Perelada (Empordà). Una de sus principales ilusiones era recuperar su tradición vitivinícola que encuentra sus orígenes en el siglo XIV, cuando los monjes carmelitas que vivían en el monasterio anexo al castillo ya producían un excelente vino con el que abastecían a toda la región.
Javier Suqué, nieto del fundador, preside Perelada & Chivite y ha sido el encargado no sólo de mantener vivo ese compromiso con la elaboración de vinos de calidad, sino de reforzarlo todavía más buscando la mejora constante.