
Celia Vizcarra es un vino tinto elaborado bajo la Denominación de Origen Ribera del Duero con uva mayoritariamente Tinto Fino (Tempranillo) 95%, con un toque de Garnacha 5%, cultivada en viñedos con 55 años de antigüedad.






- D.O
- Ribera del Duero
- Variedad de uva
- Tempranillo 95% y Garnacha 5%
- Vinificación
- Vendimia manual en cajas de 15 kg. Maceración seleccionado en mesa, despalillado antes de la fermentación, 25 días en barricas nuevas de 400 litros abiertas y 3 bazuqueos diarios a una temperatura de 27º C. Maloláctica en barrica. Crianza de 16 meses en barrica de roble Francés (95%) y Americano (5%).
- Viñedo
- Edad del viñedo de 55 años
- Envejecimiento
- 16 meses
- Productor
- Bodegas Vizcarra S.L (Finca Chirri S/N, 09317 Mambrilla de Castrejón, Burgos, España)
- Origen
- Mambrilla de Castrejón (Burgos)
- Graduación Alcohólica
- 14,5%
- Peso
- 750 ml
- Vista
- Color cereza, borde granate.
- Nariz
- Hierbas de monte, fruta madura, terroso, roble cremoso y especias dulces.
- Boca
- Sabroso, potente, carnoso, complejo y largo.
- Tipo
- Tinto
Al terminar sus estudios de Enología, Juan Carlos Vizcarra, actual propietario de la bodega, decide seguir los pasos de su padre, José Manuel Vizcarra Aguado, uno de los pioneros en realizar plantaciones de viña en la zona de Ribera del Duero en los años 80.
En 1991 empieza a elaborar vinos jóvenes para, posteriormente, crear vinos de guarda. Su espíritu innovador le lleva a elaborar el primer y único tinto de maceración carbónica de Ribera del Duero con la cosecha de 1995. En 1998 salió al mercado el primer reserva de la bodega con la añada 1994.
Sus vinos se elaboran a partir de la uva procedente de sus 40 hectáreas de Tinto fino, una hectárea y media de Garnacha, una hectárea de Merlot y plantaciones de otras variedades foráneas integradas en el corazón de la Ribera del Duero, en los términos municipales de Mambrilla de Castrejón y Roa de Duero.
La vendimia se realiza siempre a mano y sus frutos son cuidadosamente seleccionados grano a grano antes de entrar en la bodega. Una vez allí, el conjunto de procesos de elaboración y crianza se realiza por gravedad, evitando así el uso de bombas para conseguir una mayor concentración de aromas y unos taninos más elegantes.