





- D.O
- Montilla - Moriles
- Variedad de uva
- Pedro Ximénez
- Vinificación
- 70 años de crianza oxidativa. Botas en sistema de solera.
- Viñedo
- Finca El Coscojal. Edad del viñedo de 50 años. Altitud de 400m. Suelo de Albariza.
- Productor
- Dominio de Casalta S.L (C/ Pérez Galdós 3 2º Derecha, 02003 Albacete, España)
- Origen
- Montilla (Córdoba, España)
- Graduación Alcohólica
- 15%
- Peso
- 500 ml
- Vista
- Vino blanco, de apariencia clara, lágrima densa. Intensidad profunda de un color caoba.
- Nariz
- Nariz limpia, de intensidad alta, de notas que recuerdan a frutos secos, higos secos, pasas, chocolates, cafés, notas licorosas y salinas y un predominante carácter de notas oxidativas de gran complejidad.
- Boca
- En boca es muy dulce, de acidez media, alcohol alto, cuerpo alto. La intensidad de sabores es alta con recuerdos de frutos secos, higos secos y pasas, chocolates y cafés y con un final largo de marcado carácter a frutos secos y chocolates.
- Tipo
- Blanco
Viene del sector farmacéutico, y regentó una farmacia hasta que, en 2010, descubre que las viñas de una propiedad familiar, que habían ganado la reputación de dar las mejores Garnachas tintoreras de la zona, se estaban utilizando para diluirse en depósitos de bodegas destinadas a hacer vino de grandes volúmenes.
Esto le mueve a comenzar a vinificar la uva de estos viñedos, con el compromiso de poner en valor la calidad de una uva y la identidad de territorio con unas características muy especiales. A partir de entonces empieza un camino de crecimiento en el que busca nuevas regiones con un potencial por descubrir, con el firme compromiso de hacer vinos excepcionales y con matices personales.
Pepe tiene una forma única de entender el vino. Siempre busca viñedos singulares (parcelas con una identidad propia y un gran potencial), con elaboraciones artesanas, haciendo pequeñas producciones e interviniendo lo justo para reflejar al máximo cada terroir en el que trabaja.
A lo largo de estos años ha creado proyectos como Sopla Levante, donde recupera variedades olvidadas en parajes míticos del Levante a escasos metros del mar, Viñadores de Castilla; un movimiento de puesta en valor del patrimonio vitivinícola en Castilla León o Atalaque, donde salva del arranque unas viñas de garnacha de 120 años que han dado vinos de una calidad extraordinaria. Una extensa lista que va desde Almansa hasta Toro, pasando por el marco de Jerez, y que certifica a Pepe Rodriguez de Vera como un productor que apuesta por viñedos únicos y aporta a sus vinos una visión personal.